Viajes moteros en pareja. Miradores para juraros amor eterno… o lo que surja [Segunda parte]

Las Médulas son los restos de un yacimiento de oro a cielo abierto que usaban los romanos (dicen que el mayor de todo el Imperio). Localizadas en El Bierzo leonés, están declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. 

Su punto más alto es el mirador de Orellán donde se consiguen las imágenes más espectaculares. No obstante, es más que interesante hacer todo el circuito para apreciar la belleza del conjunto y, sobre todo, enteraros de cómo los romanos consiguieron extraer cerca de 5 millones de kilos de oro durante los 190 años que estuvo en funcionamiento la mina.

Junto al mirador de Orellán, hay una antigua galería romana que se puede visitar. El final de este túnel va a dar a un balcón desde donde podrás ver el interior de las minas.

Para llegar a Las Médulas, podéis ir por la A-6 o la N-VI, desde Ponferrada o desde Villafranca del Bierzo, hasta enlazar con la N-120. Junto al pueblo de La Barosa se toma la desviación a Carucedo. Otra posibilidad es coger la N-536, desde Ponferrada, hasta los pueblos de Borrenes o Carucedo.

Más información: www.espaciolasmedulas.es

Desde este mirador, tendréis una vista del gran cañón del Duero con el embalse de Aldeadávila de fondo y, en frente, el pueblo portugués de Broçó. Si tenéis suerte, hasta podréis ver buitres dominando el cielo. La vista supone asomarse a un precipicio con 400 metros de caída.

Ubicado en Parque Natural de las Arribes del Duero, este balcón no es el único al que asomarse. Muy cerquita  está el mirador llamado Picón de Felipe en honor a la antigua historia de un joven pastor, Felipe, que frecuentaba la zona con sus cabras. Estaba enamorado de una muchacha portuguesa de Broçó y, lógicamente, les separaba el Duero.

La leyenda en este punto tiene 2 versiones. Una dice que Felipe intentó construir un puente con sus rudimentarias herramientas para lograr acercarse a su amor. Otra, más radical, coloca a Felipe intentando derribar la montaña a barrenazo limpio para taponar el lecho del río y poner fin a su distancia.

Para acceder, deberéis llegar a Aldeadávila de la Ribera y buscar la ruta del Duero GR-14.

Más información: www.aldeadavila.es

La sierra madrileña esconde tesoros como los miradores de los poetas a poco más de 60 kilómetros de Madrid capital, en el pequeño pueblo de Cercedilla. Es una ruta nada exigente que une naturaleza y cultura.

El primero de los miradores, Vicente Aleixandre, fue inaugurado en 1984, año de la muerte del poeta. El segundo, en homenaje a Luis Rosales, fue abierto en 1986. Aparte de las vistas, podéis leer poemas de ambos escritores sobre las rocas, además de otros como  Antonio Machado.

Desde estos 2 miradores podréis tener una visión de pueblos serranos como Guadarrama, Los Molinos y Cercedilla,  la presa del embalse de Navalmedio, el pantano de Valmayor y, sobre todo, el murallón de Siete Picos, el Collado de Marichiva, La Peñota y Montón de Trigo. Si el día está despejado, se ve hasta Madrid.

Para llegar a Cercedilla, desde Madrid, tomad la A6 hasta el desvío hacia Collado Villalba o Guadarrama. También podéis coger la carretera de Colmenar (M-607), tomando el desvío por la M-614 hacia Cerceda y el Puerto de Navacerrada. Una vez allí, dirigíos a los aparcamientos del Valle de la Fuenfría.

Más información: www.cercedilla.es

También conocido como el Monte Zuleima, nombre que le dieron los musulmanes, el cerro del Viso es un punto más que interesante si lo que queréis, por ejemplo, es tener una buena visión de la silueta del skyline madrileño presidido por sus 4 torres.

Por supuesto, este no es su único atractivo ya que desde sus más de 700 metros de altitud se divisan perfectamente la sierra de Guadarrama y la sierra de Ayllón en Guadalajara.

El cerro del Viso pertenece a tres términos municipales: Villalbilla, Alcalá de Henares y Torres de la Alameda. Alcalá de Henares lo incluye dentro de ‘Los Cerros de Alcalá’, uno de los entornos naturales más conocidos del municipio que alberga restos arqueológicos importantes de diferentes culturas.

En el cerro del Viso, sin ir más lejos, pueden verse las huellas de los pueblos carpetano, romano y árabe.

El acceso principal a Los Cerros se encuentra en la carretera de Pastrana (M-300) Km 25, frente al Cementerio Jardín. Allí está situado el aparcamiento a través del cual se accede al parque.

Más información: www.loscerrosdealcala.es

El mirador de la Antigua es el lugar por excelencia para ver el Meandro de Meleros, una maravilla natural para quedarse literalmente con la boca abierta.

Ubicado en la comarca de Las Hurdes, concretamente en Ríomalo de Abajo, tiene la peculiaridad añadida de que en la salida del pueblo hay una piscina natural sobre el río Ladrillar.

Para llegar, lo primero es ir a Ríomalo de Abajo. Allí existe una pista forestal (asfaltada y de tierra) practicable en moto que os llevará hasta el mirador.

Más información: www.turismoextremadura.com

Localizado a 1.274 metros de altitud, el mirador del Puerto de Tornavacas tiene una vista privilegiada de las cumbres de la Sierra de Gredos y la Sierra de Béjar, además de todo el Valle del Jerte.

Si escogéis ir justo cuando el almendro está en flor, por el mes de marzo más o menos, será ya la perfección absoluta. El estallido de color de la flor del almendro en contraste con el verde y las altas montañas os aseguran una magnífica foto.

Está situado en el kilómetro 352 de la N-110 que recorre el Valle del Jerte, entre Plasencia y Ávila.

Más información: www.turismovalledeljerte.com

El toledano cerro Calderico es conocido por sus 12 molinos de viento tradicionales bautizados con nombres procedentes del Quijote (Clavileño, Espartero, Rucio, Caballero del Verde Gabán, Chispas, Alcancía, Cardeño, Vista Alegre, Sancho, Mochilas, Mambrino y Bolero).

El Molino Bolero, sede de la Oficina de Turismo, es visitable, aunque tendréis que pagar 1.50 euros.

Sin embargo, desde donde realmente obtendréis una buena vista de Consuegra y la llanura manchega es desde el castillo. Aprovechad para verlo por dentro (aljibes, nave archivo, sala capitular, nave ermita, etc). No es gratis, cuesta 4.50 euros, pero merece la pena.

Desde Madrid, llegaréis a Consuegra a través de la A-4 hasta la localidad de Madridejos donde deberéis tomar la vía CM-42, dirección Toledo.

Más información: www.consuegra.es

El Ventano del Diablo está enclavado en una impresionante hoz formada por el río Júcar, en las inmediaciones de Villalba de la Sierra. Es una cueva horadada en la roca desde la que, con cientos de metros de desnivel, se contempla en todo su esplendor el río Júcar abriéndose paso por una angosta garganta.

Está muy cerca de la Ciudad Encantada, otro reclamo turístico de Cuenca por lo que podéis matar dos pájaros de un tiro.

Desde Madrid hay una salida directa a la Ciudad Encantada (salida 309). Luego, seguid hacia Tragacete y llegarás al pueblo de Villalba de la Sierra. Ahí podréis decidir si continuar la carretera hacia la Ciudad Encantada o poner rumbo al Ventano del Diablo.

 

Más información: www.descubrecuenca.com

Pueblo serrano de Córdoba, su situación de frontera natural entre el Parque Natural de la Sierra Subbética y la campiña cordobesa, hace de él una atalaya perfecta.

Desde cualquiera de sus laberínticas y empinadas calles tendréis buenas vistas, pero sin duda el punto por excelencia es el Castillo de Zuheros, edificado durante la dominación árabe en el siglo IX y erigido sobre un enorme risco.

Actualmente alberga restos de un palacio de estilo renacentista.

Zuheros cuenta con varias vías de acceso por carretera: la A-45 desde Málaga o desde Córdoba; la A-318 desde Sevilla, A-339 que cruza la comarca de este a oeste; y la A-432 que es su entrada por el Norte.

Más información: www.zuheros.es

El Yelmo es un pico enclavado en la  provincia de Jaén, en la localidad de Segura de la Sierra. Sus laderas, algo empinadas están cubiertas por densa vegetación, que se va perdiendo conforme se va coronando la cima.

Se puede acceder en moto hasta su cumbre a través de una pista asfaltada. Desde sus 1.808 metros de altura, se puede disfrutar de una imagen privilegiada del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas llegando incluso a divisar zonas de Granada,. Albacete o Ciudad Real.

Por si os animáis, hay una zona potente de vuelo de parapente con 2 puntos de despegue.

La carretera de acceso a Segura de la Sierra es la JV-7032.

Más info: www.sierrasdecazorlaseguraylasvillas.es

Dicen que es uno de los lugares más famosos y visitados de Andalucía porque es el sitio perfecto para tomar una fotografía panorámica del mar Mediterráneo.

Situado entre las dos playas de Nerja más conocidas, la playa de Calahonda y la playa de la Caletilla, el Balcón de Europa es un reclamo turístico y dinamizador del municipio. Tiene hoteles, restaurantes y tiendas a lo largo del paseo.

Para llegar tendréis que llegar al centro de Nerja. Desde Málaga, tomad la A-7 en dirección Motril-Almeria, pasad Vélez-Málaga y coged la salida 292 hacia Nerja.

Más información: www.nerja-turismo.com

El mirador de La Amatista está muy cerca de un punto de información turística, ideal para haceros con información sobre el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar si vais a estar varios días por la zona.

Además, en los alrededores, comienza el sendero Requena, una antigua vereda a pie de costa desde la que se divisa todo el Valle de Rodalquilar, además de las canteras mineras del Cerro del Cinto y los macizos montañosos circundantes.

Desde La Amatista tendréis unas inigualables vistas de la naturaleza volcánica del litoral almeriense.

El mirador de La Amatista tiene un fácil acceso ya que se encuentra a pie de la carretera, en la vía AL-4200  entre las poblaciones de La Isleta del Moro y Rodalquilar.

Más información: www.cabogataalmeria.com

El Parque del Centenario guarda una pequeña y agradable ruta que termina en una torre de hierro que, desde arriba, os brindará una visión de 360 grados de toda la zona. Veréis toda la bahía, el Estrecho de Gibraltar, la costa africana y las sierras algecireñas.

Si la imagen os dice más bien poco, os sugerimos que no os perdáis este vídeo para que veáis que la visita puede ser una buena idea.

El sendero, que os llevará escasos 30 minutos, se encuentra en la Punta de San García de Algeciras.

Desde el enlace entre la autovía A-7 y la N-340, tomar la salida Algeciras Sur por la CA-223 y posteriormente la carretera de Getares. La entrada del Parque del Centenario se encuentra al final de la calle del Delfín.

Más información: www.dipucadiz.es

El Mirador astronómico del Cerro del Hierro es uno de esos que no sabemos si recomendarte para el día o la noche ya que es uno de los mejores lugares para la contemplación del firmamento.

Ubicado en el Parque Natural de la Sierra Norte, en concreto en la localidad sevillana de San Nicolás del Puerto, en otoño e invierno es posible ver los brazos exteriores de la vía láctea y durante todo el año la constelación de la Osa Mayor. 

Para acercarte hasta San Nicolás del Puerto desde Sevilla, pilotad en dirección a Alcalá del Río por la carretera SE-431 hasta Lora del Río y tomad por la carretera A-455 hasta Constantina. Pasado este pueblo, coged la carretera SE-163.

Más información: www.andalucia.org

Recuerda un poco al Cristo del Corcovado de Río de Janeiro, aunque hay que decir que el Cristo de Monteagudo es 100% murciano. Vigila y cuida el castillo del mismo nombre desde 1951.

El castillo es bastante más antiguo. Su construcción data del siglo XI. Es una pena que ninguno de los dos pueda ser visitado.

En cualquier caso, el mirador a mitad de recorrido tiene la altura suficiente para que podáis admirar Murcia y sus pueblos cercanos.

Más información: www.monteagudo.info

Desde el año pasado está rodeado de polémica ya que, al parecer, hay planteamientos para convertir el faro de Cabo de Palos en un hotel o, al menos, de darle un uso turístico diferencial.

El faro, que lleva en uso desde 1865, está construido en una pequeña península de unos 400 metros de anchura y 80 metros sobre el nivel del mar.

Es un emblema de Cartagena y uno de los lugares preferidos para ver una puesta de sol mágica y quedarse hipnotizado con la vista del inmenso mar.

Más información: www.murciaturistica.es

El de Ambolo es uno de los miradores que Jávea tiene la suerte de poseer dentro de su territorio. En ese sentido, el Ayuntamiento ha confeccionado una ruta con un total de 15. Nosotros hemos escogido un par de ellos por su especial belleza.

El Mirador de Ambolo fue concebido como una defensa del litoral. Albergaba la torre del Descubridor con dos garitas ya desaparecidas. Su privilegiada situación permite recorrer con la vista desde el Cabo de la Nao hasta la Punta de Moraira.

Más información: www.xabia.org

El mirador de Les Pesqueres, además de sus paisajes impresionantes, esconde una historia de lo más curiosa. Para empezar, el nombre hace referencia al arte de la pesca que se hacía en estos acantilados.

Los hombres de Xàbia y poblaciones limítrofes pescaban literalmente colgados de las verticales paredes de sus acantilados. Con cuerdas, y apoyados sobre las peñas o encima de un frágil cañizo, se descolgaban con la caña y un tridente, especialmente en las largas y oscuras noches de invierno.

Más información: www.xabia.org

El mirador de la Creueta y el Colomer, en la punta de la Nao de la península de Formentor, son parada obligadísima si estáis en Mallorca. Situado a más de 200 metros de altura, el mirador es como un hermoso cuadro de la Serra de Tramuntana y del mar Mediterráneo.

Para muchos turistas y visitantes de la isla es todo un clásico ir allí a terminar el día viendo cómo el sol se pone sobre el mar.

Desde aquí también puede observarse el islote del Colomer, con una altura de 112 metros sobre el nivel del mar y 300 metros de longitud.

Podéis acceder a este mirador a través de una estrecha carretera desde el Puerto de Sóller. Ojo con las curvas porque vais a internaros en la Serra de Tramuntana, un paraje montañoso alucinante, pero que conviene tomarse con tranquilidad.

Más información: www.illesbalears.travel

La Torre del Pirata, Torre des Cap des Jueu o  Torre des Savinar se encuentra en el interior de la Reserva Natural de Cala d’Hort, sobre un acantilado y con la compañía muda de los islotes de Es Vedrà y Es Vedranell.

Aunque nació como torre artillera, nunca llegó a cumplir este cometido y se limito a ser un lugar privilegiado para la vigilancia.

Actualmente es de propiedad privada, así que para admirar las vistas desde esta atalaya hay que pagar 2 euros.

Para llegar, tomad la carretera que une Es Cubells con Cala d’Hort. Cuando veas la parte superior de Es Vedrà, girad hacia el mar por un camino de tierra que lleva a la Torre de Es Savinar. A unos 250 metros, tendréis que aparcar la moto y seguir a pie.

Más información: www.ibizaisla.es

Espectacular mirador, a 620 metros del nivel del mar, del que sale un voladizo de 7 metros de largo con paredes y suelo de cristal que hace que el visitante tenga la sensación de estar suspendido en el aire.

El que se atreva a mirar hacia abajo -400 metros más abajo, concretamente- verá el pequeño valle de Agulo abierto al Atlántico y protegido entre acantilados. A lo lejos, se divisa la isla vecina, Tenerife, coronada por el Teide.

El acceso al mirador no es difícil, pero sí estrecho, así que conviene que toméis precauciones. Tendréis que ir hasta el barrio de La Palmita y, una vez allí, buscar el Centro de  Visitantes Juego de Bolas del Parque Nacional del Garajonay. Ahí existe un cartel que os indicará el resto del camino.

Más información: www.holaislascanarias.com

Otra de las obras de César Manrique, el Mirador del Río es sobre todo conocido por ofrecer una panorámica extraordinaria de la pequeña isla de La Graciosa, acompañada por el conjunto de islotes que dan nombre al Parque Natural del Archipiélago Chinijo (Montaña Clara y el Roque del Oeste, así como Alegranza y el Roque del Este).

Está situado a 400 metros de altitud en el Risco de Famara y camuflado entre los restos de una antigua batería militar. En el paisaje destacan los colores rojizos de las salinas más antiguas de la Isla, las Salinas del Río.

Ojo porque el acceso es de pago. Tendréis que pagar 4,75 euros. Para acceder, llegad hasta la carretera de Yé en el municipio de Haría.

Más información: www.cactlanzarote.com

Obra del arquitecto más famoso y querido de Canarias, César Manrique, el Mirador de la Peña no solo permite ver una estampa sobrecogedora del Océano Atlántico, sino conocer una parte de la historia de isla más pequeña del Archipiélago canario.

Las vistas dan al valle de El Golfo, fruto del gigantesco deslizamiento de tierras ocurrido hace milenios, y la Fuga de la Gorreta, un risco elevado a 1.000 metros sobre el mar y 15 kilómetros de ancho, por el que antes los pastores transitaban. Desde el mirador se puede apreciar también los roques de Salmor.

Para llegar, tendréis que poner rumbo al pueblo de Guarazoca, situado en el norte de la isla. Preparaos para carreteras bien asfaltadas, pero llenas de curvas.

Más información: www.holaislascanarias.com

Es el punto más alto de Gran Canaria, así que presuponemos que las vistas no os van a defraudar. El Pico de las Nieves está situado en centro de la isla, a 1.949 metros de altitud.

Aparte de ver Tenerife, el paisaje incluye grandes formaciones montañosas y rocosas, fruto de erupciones pasadas, como el Roque Nublo, el Roque Bentayga, El Fraile, Llanos de la Pez y Pargana, o la Caldera de Tejeda y la de Tirajana.

Podréis acceder hasta la base del pico cómodamente en moto donde hay un parking. Junto al aparcamiento, existe un semicírculo revestido de piedra orientado a poniente. Es el mirador, sencillo, pero el mejor escenario para vivir un amanecer, una puesta de sol o simplemente deleitarse con la Naturaleza en estado puro.

Más información: www.holaislascanarias.com