Si algo tienen los faros es que, tras un camino no siempre fácil, te recompensan con unas vistas impresionantes de la costa y esa sensación de hacerte pequeño ante la inmensidad del mar azul. Es una ruta ideal para disfrutarla en pareja porque estas torres hechas para guiar a los navegantes a tierra son un rinconcito de lo más romántico para acurrucarse y disfrutar de un atardecer esplendoroso o un amanecer sublime.
Estáis en la mejor época para escaparos y vivirlo. Así que, aquí va nuestra particular guía para descubrir los faros más bonitos de España.
GALICIA
Faro Illa Pancha (Lugo)
El más antiguo, construido en el siglo XIX, fue reconstruido y convertido en hotel. Sí, podréis dormir en él si os apetece. El segundo data de finales del siglo XX y es el que funciona como faro para navegantes.
Además de los faros, Illa Pancha tiene más atractivos como el estrecho puente que la une a tierra firme o una ola especial llamada el ‘panchorro’ que rompe en los días de temporal y puede alcanzar los 18 metros de altura.
Faro de Cabo Ortegal (A Coruña)
De entre los acantilados de A Serra da Capelada destaca el alto de Vixía Herbeira de 613 metros de altura, lo que le convierte en uno de los más altos de Europa.
ASTURIAS
Faro de San Emeterio (Ribadedeva)
También conocido como el Faro de Tina Mayor, lleva en funcionamiento en 1864 en una zona aislada y rodeada de un bosque de encinas. En los alrededores, está la capilla de San Emeterio que le dio nombre y la cueva rupestre del Pindal.
Faro de Cabo Torres (Gijón)
Además, en el exterior, se ha construido un mirador sobre el mar. Con todas estas modificaciones, el faro de Cabo Torres es una de las visitas obligadas en Gijón.
CANTABRIA
Faro Punta del Pescador (Santoña)
Para acceder, hay una carretera estrecha desde la playa de Berria y la parte posterior de la cárcel del Dueso o penal de Santoña. Son cerca de 3 kilómetros por la costa cántabra que en moto son un pequeño regalo.
El faro Punta del Pescador alberga actualmente un pequeño museo dedicado al pintor cántabro Eduardo Sanz con parte de su obra y de su colección personal de objetos relacionados con el mundo de los faros.
Faro de San Vicente de la Barquera (San Vicente de la Barquera)
Es cierto que quizás no es de los más espectaculares, pero el conjunto de la villa de San Vicente de la Barquera ofrece tantas posibilidades que no podemos dejar de incluirlo.
Construido bajo el reinado de Isabel II y remodelado varias veces desde el siglo XIX, se comunica con San Vicente de la Barquera por una estrecha carretera asfaltada de 1,5 km que bordea la ría.
EUSKADI
Faro de la Plata en Pasaia (Gipuzkoa)
Levantado a 148 metros sobre el nivel del mar, su construcción está inspirada en los castillos medievales. Por desgracia, su interior no es visitable.
Si os apetece estirar las piernas y andáis bien de tiempo, hay muchas rutas de senderismo que tienen su punto final en el faro. Estos caminos no requieren una forma física muy exigente.
Desde el barrio donostiarra de Gros hasta el faro hay aproximadamente 8 kilómetros que suponen unas 2 horas de caminata. Está perfectamente señalado y ya te avisamos que la cámara de fotos o tu móvil van a echar humo porque la ascensión te ofrece una postal en cada curva.
Faro de Gorliz (Bizkaia)
El municipio es de sobra conocido por sus largas playas de arena blanca y oleaje tranquilo, pero además atesora el faro ubicado a mayor altura de toda la cornisa cantábrica. No es visitable, pero toda la travesía hasta llegar es una verdadera pasada. Mejor caminando.
CANARIAS
Faro de Punta de Teno (Tenerife)
Después del faro de Teno no hay nada más, solo la inmensidad del mar y una pequeña cala para daros un baño. Decorado en blanco y rojo, rodeado de piedra volcánica y con los acantilados de Los Gigantes de frente es un atractivo turístico de primer orden.
Con un entorno de aguas cristalinas para las que son imprescindibles las gafas y el tubo y fondos marinos limpios, nuestra sugerencia es que os acerquéis a este paraíso en la tierra entre semana y gozarlo así con tranquilidad y espacio.
Faro Punta Orchilla (El Hierro)
Si bien es cierto que el entorno es duro, inhóspito, seco y lo único que verás son rocas y más rocas, tiene una historia de lo más interesante. En la antigüedad, Orchilla era el punto más extremo de la tierra conocida. Desde aquí, los navegantes consideraban al océano Atlántico como el mar de las Tinieblas.
Además, este lugar se convirtió en el siglo XVII en el punto de referencia del meridiano cero hasta que fue desplazado por el de Greenwich.
Conocido también como el faro de las rutas Atlánticas, es la primera luz que encuentran los navegantes de la América del Norte y Central que se aproximan a las costas de Canarias.
COMUNIDAD VALENCIANA
Faro de Punta Albir (Alicante)
No en vano, su recorrido va por el interior del Parque Natural Parque Natural de la Serra Gelada al que pertenece el faro de Punta Albir o Bombarda. Este último nombre hace referencia a la antigua torre vigía del siglo XVII cuyos ruinas podéis visitar. En el faro hay un centro de interpretación sobre la riqueza natural de la zona.
Faro de Columbrete Grande (Castellón)
Las Colombretes son una serie de islotes y escollos situados a 30 millas de la costa de Castellón y asentadas sobre un fondo marino de unos 80 metros de profundidad. Están reunidos en 4 grupos: l’Illa Grossa, la Ferrera, la Foradada y el Carallot.
Si os animáis, hay un itinerario fijo de unas dos horas que va del puerto de Tofiño hasta el faro de Columbrete Grande. El paseo se hace en grupos reducidos de personas siempre acompañadas por los monitores o por los guardas que os darán una explicación de los aspectos más relevantes de la reserva marina que rodea el archipiélago y tiene una superficie de 5.543 hectáreas.
Hay una historia que une estas islas y el faro. Inaugurado en 1859, las serpientes o columbretes (una especie de víbora endémica) que poblaban a sus anchas en el Archipiélago amenazaban la vida a los torreros y sus familias. Para acabar con ellas, en principio, fueron destinados medios humanos, es decir, presos condenados a muerte que redimían así su pena.
Tras varios fallecimientos, los hombres fueron sustituidos por cerdos ya que, al parecer, son inmunes al veneno de este tipo de culebras. Costó casi 30 años, pero para 1890, de las columbretes solo quedaba el nombre.
¿En qué faros podréis pasar una noche?
Pasar la noche dentro de un faro puede ser la guinda de una ruta motera mágica. Por desgracia, no hay muchos faros que ofrezcan esta posibilidad en España, pero aquí tienes la relación en los que sí podréis reservar una habitación. ¡Feliz noche!
Faro de Illa Pancha en Ribadeo (Lugo)
Faro de Finisterre (A Coruña)
Faro de Punta Cumplida (La Palma)
Dispone además de una infinity pool frente al mar y un jardín de más de 5.000 metros cuadrados por el que pasear.
No podemos decirte cuánto cuesta porque no se puede reservar online, pero nos da en la nariz que es para ocasiones superespeciales.