La verdad es que cuesta un poco creer que alguien se arriesgue a ir sin guantes en una moto, pero el hecho de que en España todavía no sea obligatorio para pilotar hace que algunos se quieran ahorrar esta prenda y se olviden de que ante todo es un elemento de seguridad activa. Los guantes cumplen la función principal de protegernos de las inclemencias externas en invierno (agua, frío, viento) y verano (sudor). Sólo ya el hecho de tener las manos secas y con una buena temperatura contribuye a un pilotaje más seguro.
Unas manos frías son sinónimo de entumecimiento con la consiguiente pérdida de sensibilidad al tocar el manillar. Con unas manos mojadas también perderemos agarre. Por último, si dejas tus manos al descubierto te expones a que se te peguen o te piquen bichos, te golpeen pequeños proyectiles y, lo más importante, en caso de accidente, sufras abrasiones graves al contacto con el asfalto. Como ya te hemos dicho en otras ocasiones, como en la vida a pie, cuando te caes de la moto, nuestro freno natural son las manos.
En Tienda Moto no nos dedicamos a la adivinación, pero como dice el refrán: “Cuando las barbas de tu vecino veas cortar…”. Precisamente nuestros vecinos franceses parecen tenerlo claro y, a partir del próximo mes, obligarán a los motoristas y, ojo, también a sus copilotos a llevar guantes. No valdrá, además, cualquier tipo de guante, sino que éstos deberán estar homologados. ¿En qué se traduce esto? Sencillo. Desde el 20 de noviembre, los moteros franceses tendrán que asegurarse de que el marcaje sea el correcto para cumplir la ley y librarse así de una multa. Tanto los que ya los tienen como los que tengan que adquirir unos nuevos, tendrán mirar que la etiqueta interna de sus guantes tenga grabados los siguientes elementos:
El Gobierno francés pretende una vez más aumentar así la seguridad de los motoristas en carretera. Decimos una vez más porque desde primeros de año también es obligatorio para cualquier motorista francés llevar un chaleco reflectante –igual que el que llevan los conductores de vehículos de cuatro ruedas- en la moto para su uso en caso de emergencia y/o accidente.
Mientras que no llevar guantes está penalizado con una multa de 68 euros, el hecho de no contar con el chaleco reflectante en el momento de ser parado por un agente galo costará 135 euros. Aun así, quizás leas con cierta distracción este post porque pensarás que esto sólo afecta a los franceses. Nada más lejos de la realidad. Presta atención porque si tienes pensado hacer una ruta en moto por Francia, tendrás que cumplir también ambas normas. Todo lo que te hemos contado es válido para ti en el momento que pongas el pie allí. Si no lo haces, te arriesgarás a ‘regalarle’ a las arcas francesas algo más de 200 euros. Con ese dinero te compras unos buenos guantes homologados, un chaleco y todavía te sobra para un buen cassoulet, ¿no te parece?
