De momento solo existen en dos carreteras de Castilla y León, pero es probable que durante esta legislatura otras comunidades se vayan sumando. Si es así, y pilotas por alguna vía secundaria con líneas verdes pintadas justo al lado de la línea blanca que delimita la calzada y el arcén, tranquilo, porque no te pasa nada en la vista.
Es una medida que la DGT puso en marcha en 2016 en la CL-615 y la CL-613 como experiencia piloto y que podría reactivarse.
¿Cuál es la razón principal? Según Tráfico estas líneas consiguen que los conductores reduzcan la velocidad ya que, por un efecto óptico, la vía parece estrecharse y echan mano (o pie) del freno. La idea es que los usuarios tengan claro que están circulando por un tramo de control intensivo de la velocidad sin tener que recurrir a los impopulares radares.
Esta práctica fue importada de países como Suecia y Holanda donde se demostró que las marcas de colores «generan en los conductores la sensación de estrechamiento del carril para inducirles a moderar su velocidad. Se pretende que el usuario de la vía identifique y vaya asociando estas indicaciones a tramos de carreteras de velocidad controlada, con el fin de que en un futuro cercano, una vez producido el efecto de concienciación en los conductores, no sea necesaria la instalación de sistemas de control de velocidad, y se obtenga una carretera autoexplicativa».
Según datos oficiales del informe de la DGT Las principales cifras de la siniestralidad vial. España 2017, la velocidad excesiva está detrás del 18% de los accidentes de tráfico -4.902 en 2017- y es la causa de 1 de cada 3 siniestros con muertos en la carretera en España.
Los datos para el conjunto de la Unión Europa tampoco son muy positivos ya que el número de fallecidos en accidente de carretera no ha experimentado una bajada significativa durante 2018. En ese sentido, 25.100 personas perdieron la vida en accidentes de tráfico el año pasado, apenas 200 menos que en 2017.
La UE parece tener claro que una de las posibles soluciones pasa por hacer obligatorios los limitadores de velocidad automáticos y maneja la fecha de 2022 para que todos los coches nuevos salgan de fábrica con el asistente de velocidad inteligente o sistema ISA incorporado. Antes, en 2020, se pretende hacer lo mismo con la frenada automática que puede incluso detectar peatones y ya se deja ver en los anuncios de algunas marcas.
Estas medidas no parecen afectar, de momento, a los motoristas quizás porque implementar este tipo de adelantos tecnológicos en una moto es más complicado y, además, están considerados un colectivo mucho más vulnerable frente al coche. De hecho, los fallecidos usuarios de turismo en 2018 fueron 594, el 50% del total, frente a los moteros con 211 fallecidos, el 18% del total.
Aunque es cierto que el año pasado se redujo la cifra de motoristas muertos en siniestros de tráfico un 12%, no hay mucho lugar para el optimismo ya que, por desgracia, aumentaron las personas fallecidas en ciclomotor.
Cabe recordar que la velocidad es también uno de los caballos de batalla principales en la siniestralidad a dos ruedas. Así, entre las causas de los accidentes en los que los motoristas son culpables, destacan la velocidad inadecuada y la falta de experiencia en el manejo de la motocicleta, según un informe realizado por la Fundación Mapfre hace algunos años.
