Pocas cosas hay tan desagradables como recibir una multa de tráfico. Pero, ¿y si resulta que la infracción no es tal y hemos sido víctimas de un timo? Te ofrecemos 3 claves infalibles para que, al menos, no te lances a facilitar tus datos y número de cuenta sin tener la seguridad de que efectivamente has metido la pata y te toca pagar.
Recibes una multa por correo electrónico y te piden los datos de tu cuenta
La Dirección General de Tráfico NO envía multas por correo electrónico a no ser que tú mismo te hayas dado de alta en la Dirección Electrónica Vial. Mucho ojo porque la Guardia Civil ha vuelto a alertar de este engaño hace pocos días que, además, no solo ocurre en el terreno de las multas. Cada vez es más corriente la ciberdelincuencia a través de la técnica conocida como phishing. Lo más común es que te manden un mail que te dirige a un sitio web falso o te solicita que te descargues o pinches en un adjunto (imagen, pdf, etc) que instalará algún tipo de malware en tu ordenador. La consecuencia es que pueden robar tu identidad, contraseñas, datos de tarjetas de crédito e incluso números de cuentas bancarias.
En el caso concreto de las multas, últimamente está proliferando el llamado timo del radar. Recibes un mail con una información aparentemente real y detallada en la que te notifican que has excedido la velocidad en una vía. Como es lógico te mosquearás porque no recordarás ni cuándo ni cómo has pasado por ese punto. En ese estado de confusión y cabreo, es más que posible que pinches para ver una supuesta imagen de tu moto y tú cazados in fraganti. El problema es que todo es mentira.
No olvides que, si no te has dado de alta en la Dirección Electrónica Vial, Tráfico no tendrá otra manera de enviarte las multas que, a través de correo certificado, “al domicilio que expresamente hubieses indicado para el procedimiento, o en su defecto, en el domicilio que figure en los registros del organismo autónomo Jefatura Central de Tráfico”.
Recuerda, además, que, tal y como ha confirmado la DGT en Twitter, aun en el caso de que recibas una notificación vía mail, en esta nunca te pedirán datos sensibles ni te exigirán ningún pago: “Lo único que hace es comunicar que un ciudadano tiene una multa y que puede acceder a su buzón electrónico para leerla previa identificación”.
No están todos los datos que deben constar en una multa
Imaginemos que estás dado de alta en la Dirección Electrónica Vial y recibes una notificación. No lo harás de cualquier manera y conviene que lo sepas. La mejor manera de estar seguro sobre si una multa es verdadera o falsa es comprobar que están todos los datos. La Ley de Tráfico en su artículo 87 establece que “en las denuncias por hechos de circulación deberá constar, en todo caso:
- La identificación del vehículo con el que se haya cometido la presunta infracción.
- La identidad del denunciado, si se conoce.
- Una descripción sucinta del hecho, con expresión del lugar o tramo, fecha y hora.
- El nombre, apellidos y domicilio del denunciante o, si es un agente de la autoridad, su número de identificación profesional”.
Si, por ejemplo, tienes la oportunidad de hacerte con una multa tipo de radar por exceso de velocidad, verás que contiene:
- Datos del vehículo (Matrícula, tipo, marca y modelo).
- Datos del conductor o titular del vehículo (Nombre y apellidos, DNI y domicilio)
- Datos de la denuncia: Número de expediente, fecha, hora, lugar de la infracción, sentido de la vía, hechos denunciados, norma infringida y su artículo, importe de la denuncia, importe bonificado, calificación de la infracción, puntos a detraer, velocidad a la que circulabas.
- Imágenes de tu vehículo en el momento de cometer la infracción dentro de la propia notificación y nunca como adjunto.
Desconfía si falta algún apartado, si te piden datos extraños o poco habituales.
No puedes comprobar la veracidad de la multa por canales oficiales
Es otra de las cosas que debería alertarte de que estás siendo víctima de un timo. Comprobar si tienes multas de tráfico pendientes es actualmente muy sencillo. Existen infinidad de páginas web de carácter privado que pueden decírtelo al momento de manera gratuita, pero también hay canales oficiales. El más importante es el TEU o Tablón Edictal Único. Es, desde 2015, el medio que deben utilizar todas las Administraciones Públicas para comunicar a ciudadanos y empresas aquellas decisiones administrativas que les afecten y que no hayan podido serles notificados personalmente. Forma parte del Boletín Oficial del Estado.
Un consejo útil es que mires si tienes contratada la cobertura de gestión de multas con tu seguro de moto. Es frecuente que las compañías ofrezcan este servicio. Con una simple llamada, ellos podrán decirte si te han puesto alguna multa últimamente y, por tanto, descartar posibles timos.
¡Ah! No te avergüences y denuncia
En cualquier caso, si has ‘picado’, no te avergüences y denuncia tu situación en la Policía. Evitarás que alguien más tenga que pasar por el timo del radar. Tampoco estará de más que hables con tu banco si, por desgracia, se han producido cargos fraudulentos en tu tarjeta o cuenta. ¡Ah! Y cuéntaselo a tu círculo de amigos. Cuanta más gente lo sepa más difícil se lo pondremos a los ciberdelincuentes.