El año nuevo traerá cambios para motoristas y conductores. Para que no te sorprendan como la típica subida de precios del primero de enero, te resumimos las 10 medidas más importantes que la Dirección General de Tráfico quiere implementar y a las que tendrás que hacer un hueco obligado en 2019.
Reducción de la velocidad máxima en carreteras convencionales a 90 kilómetros/hora.
De los actuales 100 kilómetros/hora de velocidad máxima permitida, pasaremos a los 90 kilómetros/hora para todas las vías secundarias. La DGT considera que esta reducción ayudará a solucionar la sangría de muertes en carreteras convencionales de los últimos años.
Más de la mitad de los fallecidos en accidentes de tráfico durante el año pasado perdieron la vida en este tipo de vías. Un 19% eran motoristas. Este triste dato hace que la posibilidad de morir en un siniestro de tráfico sea 3 veces mayor en una vía urbana o interurbana que en una autopista o autovía.
Por si fuera poco, el 16° estudio EuroRAP -que analiza la accidentalidad en la red vial estatal-certifica que los tramos con más riesgo de accidentalidad entre 2015 y 2017 se encuentran en carreteras nacionales de calzada única con un carril por sentido de circulación.
Limitación de la velocidad dentro de las ciudades a 30 kilómetros/hora en vías con un único carril
La verdad es que es una de las medidas que más polémica está suscitando. La limitación de la velocidad dentro de las ciudades a 30 kilómetros/hora en vías que tengan un único carril no gusta a todos, pero la DGT está convencida que es el mejor remedio para evitar las muertes de los colectivos más vulnerables: motoristas, ciclistas y peatones.
De hecho, se atreven a asegurar que los accidentes con fallecidos se reducirán a la mitad. Algunas ciudades como Madrid ya se han adelantado a la regulación estatal abrazando esta disposición con la intención de hacer más ‘amigable’ el centro.
Desde la DGT se llama la atención sobre el hecho de que el 50% de los accidentes que sufren las motos se producen cuando un turismo gira y en un tercio de los siniestros entre coches y motos, el conductor asegura que no vio al piloto. Una bajada de la velocidad contribuiría a una circulación general más sosegada y una actitud más calmada.
Dos puntos menos en el carnet de conducir para el que supere en 20 kilómetros/hora la velocidad máxima permitida
Cada 24 segundos alguien pierde la vida en la carretera, según el último informe global sobre seguridad en las carreteras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Una velocidad inadecuada está detrás de muchos de esos accidentes. Aunque a veces no somos conscientes, ir más rápido de lo que marcan las señales de tráfico nos resta capacidad de reacción frente a una situación comprometida.
Para evitar esa especie de falsa seguridad o de que no pasa nada por correr un poco, la DGT se plantea restar dos puntos a los conductores y motoristas que superen en 20 kilómetros/hora la velocidad máxima permitida en cualquier vía.
Cuatro puntos menos en el carnet de conducir para el que vaya sin casco en la moto, cinturón de seguridad en el coche o sin sistemas de retención infantil
La DGT tendrá más mano dura con aquellos que no cumplen las mínimas normas de seguridad cuando libremente deciden coger un vehículo. No ponerse el cinturón de seguridad, no llevar a los menores protegidos con sistemas de retención infantil o no usar un casco homologado saldrá más caro. Si hasta ahora suponía la pérdida de tres puntos del carnet, en 2019 pasará a ser de cuatro.
Seis puntos menos en el carnet de conducir para los que hagan uso del móvil mientras circulan
Quizás esta medida no afecte por igual a motoristas y conductores, pero con los niveles de obsesión que está alcanzado el uso del teléfono móvil, no podemos descartar que haya usuarios de la moto que no se resistan a echar una miradita o mandar un wasapito. A partir del año que viene si te pillan hablando o manipulando tu smartphone mientras conduces o pilotas te quedarás sin seis puntazos en el permiso de conducir.
Aunque parezca mentira, desde 2016 las distracciones son la primera causa de accidentes mortales, por delante de la velocidad y del alcohol y otras drogas. Para la DGT estas distracciones se llaman: mirar el correo, mandar un WhatsApp, contestar una llamada o hacer una foto para subirla a redes sociales en un momento que NO toca.
Aumento del número de radares en las carreteras y de efectivos policiales para controlar el tráfico
El director general de Tráfico, Pere Navarro, lo tiene claro. Más control por tierra, mar y aire quiere decir menos accidentes y menos muertos. En consecuencia, habrá más radares para controlar la velocidad -una de las infracciones más comunes en las carreteras de todo el mundo- y se incrementarán los medios humanos para controlar las vías. Navarro no lo dice, pero ya te lo decimos nosotros. Más radares y más guardias civiles también quiere decir más multas. De cara a 2019, contrólate.
Los guantes de moto pasarán a ser obligatorios para los pilotos
Es uno de esos globos sonda que se lanzan cada tiempo, aunque esta vez parece que va en serio. 2019 puede ser el año en que sigamos el ejemplo de nuestros vecinos franceses y hagamos obligatorio el uso de los guantes homologados para pilotar una motocicleta. Nosotros aplaudimos la medida y decimos ¡aleluya!, no porque los vendamos, sino porque no entendemos como alguien puede pilotar con las manos desprotegidas.
El equipamiento es una de las líneas que más parece preocupar a la DGT y promete una completa renovación del Plan de la Motocicleta, paralizado y sin modificaciones desde 2006. Muchos años sin poner al día las necesidades de un parque móvil, el de las motos, que supone un 15% del total y acumula el 22% del total de fallecidos en accidentes de tráfico.
Se estudiará, además, la obligación de pilotar con un tipo de calzado
Casco, guantes y ¿algo más? Parece ser que sí. El calzado va a ser otro de los grandes protagonistas. La DGT quiere meter mano a los pies de los motoristas, aunque de momento, solo se habla de obligar a llevar guantes y «un determinado tipo de calzado».
Su función, tal y como explica la propia DGT en un reportaje de su Revista de Tráfico y Seguridad, es «proteger pies y tobillos sin restar movilidad al piloto en el manejo de la moto. Llevar un calzado fino como zapatos de calle, mocasines o zapatillas de deporte, según el MAIDS, proporciona un factor de protección del 46%. Unas botas de motociclista, un 93%». No hace falta añadir mucho más, ¿verdad?
Premio de dos puntos para los motoristas y conductores que hagan cursos de conducción segura
Potenciar los cursos de conducción segura es una de las viejas reivindicaciones del colectivo motorista, así como de diversas organizaciones que trabajan en el sector de las dos ruedas. Por ejemplo, Anesdor y PONS Seguridad Vial han planteado varias veces esta medida a la DGT, la última hace prácticamente un año. Parece que finalmente se hará realidad con la entrada de 2019 y los más responsables recibirán dos puntos extra en su carnet si se animan a pasar por alguno de estos trainings.
En el caso de las motos este tipo de formación es especialmente importante si tenemos en cuenta que muchos conductores pasan del coche a la moto -sobre todo en ciudad- sin un periodo de transición o sin unas mínimas técnicas que les ayuden a adaptarse a su nueva situación en la vía.
En ese sentido, si nunca has oído hablar de ellos, te contamos que este tipo de formación está pensada para aprender, entre otras cosas, a anticiparte a las maniobras de otros usuarios de la vía, especialmente los coches, que pueden provocarte una caída y accidente; trabajar un mejor equilibrio encima de la moto a través de la posición y de dosificar adecuadamente el gas; evitar los ángulos muertos donde es más probable que no te vean; saber frenar en firmes deslizantes, situaciones de emergencia o en mitad de una curva, y por último, manejarte mejor en curvas, cruces y glorietas.
La obtención del carnet de conducir será más difícil
La DGT trabaja ya en un borrador para aprobar, por Real Decreto, cambios en el Reglamento General de Conductores. Se estima que entrará en vigor en julio y supondrá que la obtención del permiso de circulación para motoristas y conductores sea más difícil. ¿Cómo? A través de pruebas teóricas y prácticas más exigentes y exhaustivas. Por ejemplo, y según información publicada en El País, los aspirantes estarán obligados a dar al menos ocho horas presenciales de clases en la autoescuela y los exámenes teóricos incluirán vídeos con los que el examinador hará preguntas concretas.
En lo que se refiere a la práctica, después del primer suspenso habrá que esperar un mínimo de 15 días para volver a intentarlo, entre la segunda y tercera convocatoria al menos 30 días y en la cuarta y sucesivas tendrá que haber un margen mínimo de 20 días. Entre intento e intento, el alumno dará como mínimo cinco clases prácticas más.
