El primer consejo que me dieron cuando compré mi primer ciclomotor – era una Puch X30 y ya ni recuerdo los años que hace – fue que me pusiera siempre guantes para montar en él. Tanto en verano como en invierno. ¿Por qué? Pregunté yo ingenuamente. El vendedor me mostró las palmas de sus manos hechas unos zorros y me dijo: “Instintivamente lo primero que ponemos cuando nos vamos al suelo son las manos. Sin guantes, se desuellan. Imagínate no poder usar las manos para nada en unos días.” Ni que decir tiene que los he usado en todo momento desde entonces.
Partiendo de la base que los guantes son para el motero un elemento protector de primer orden – casi al mismo nivel que el casco – y dado que la elección de un par de guantes puede ser complicada – en especial para los recién llegados a las dos ruedas – vamos a dar unas orientaciones básicas para una buena elección de unos guantes de moto.
Las tallas en los guantes de moto
Los guantes deben quedar bien ceñidos pero no deben apretar la mano. Unos guantes apretados te cortarán la circulación y perderás tacto, además cogerás frío antes. Y demasiado holgados te dificultarán los movimientos sobre los controles. En caso que no puedas probártelos, para saber la talla debes medir el contorno de la mano a la altura de los nudillos con una cinta métrica de modista. La mano tiene que estar plana y los dedos juntos, y hay que descartar el pulgar. Mide las dos manos siempre para evitar sorpresas y con la medida que te salga puedes consultar la talla que te corresponde en la tabla de tallaje estándar. En caso de duda, escoge siempre una talla más grande:
Entre 16 y 18 centímetros
Talla XXS
Equivalencia – 6
Entre 18 y 20 centímetros
Talla XS
Equivalencia – 7
Entre 20 y 21 centímetros
Talla S
Equivalencia – 8
Entre 21 y 22,5 centímetros
Talla M
Equivalencia – 9
Entre 22,5 y 24 centímetros
Talla L
Equivalencia – 10
Entre 24 y 25,5 centímetros
Talla XL
Equivalencia – 11
Entre 25,5 y 26 centímetros
Talla XXL
Equivalencia – 12
La comodidad cuenta mucho
Tienes que sentirte cómodo con tus guantes, sino la conducción se resentirá. Busca guantes que se ciñan a la muñeca, con velcro, o en su defecto con una cinta con presilla. Cuando los tengas puestos comprueba que el final de los dedos coincida con la forma de tu mano. Si te queda muy arriba, escoge una talla superior. Abre y cierra la mano repetidamente para cerciorarte de que te quedan bien.
Si vas a conducir en circuito es preferible que tengan la caña larga porque protegen más. Busca que tenga reforzado el pulgar de la mano del gas y que la palma incorpore material antideslizante. Además, los nudillos deben ir protegidos con un refuerzo rígido o semirrígido. Si son de verano, que tengan una ventilación adecuada. Fíjate en que ninguna costura te roce, porque a la larga es una molestia.
El tacto debe ser lo más suave posible para tener un buen control de los mandos, y aquí toca hablar de materiales. La piel es el mejor, pero hay calidades: a mejor tacto, más precio. Un buen guante de piel bobina o de canguro te proporcionará comodidad y un tacto estupendo, es duradero y resistente a las abrasiones, aunque en el mercado también encontramos algunos guantes de materiales textiles sintéticos que son más baratos pero tienen una buena calidad.
Cada época del año tiene su guante
Unos guantes de invierno, además de proteger de las caídas al motorista, obviamente deben abrigar y proteger de la lluvia. Son guantes gruesos, acolchados, fabricados en materiales técnicos y membranas aislantes e impermeabilizantes – GoreTex, Hipora, Thinsulate, etc –. Tienen que tener la caña larga y ajustable para que el aire frío no entre por las mangas de la chaqueta. Tienen que abrigar sin hacer sudar las manos, es decir, tienen que transpirar bien. En este renglón destacan los textiles ante los guantes de piel. El gran defecto que tienen es la pérdida de tacto por culpa de las gruesas capas que los componen.
En verano, aunque el calor te invite a dejar los guantes en el cofre de la moto, es muy recomendable usarlos. Escoge modelos finos, ventilados y de caña corta, tanto en cuero como en textil, pero que mantengan las protecciones básicas. Tendrás un tacto excelente con estos guantes, pero la resistencia a la abrasión es menor. En el segmento custom se están poniendo de moda los guantes de dedos recortados. Es una opción muy personal usarlos, teniendo en cuenta que dejan expuestas las sensibles yemas de los dedos a posibles roces o quemaduras.
Los guantes de entretiempo, como su nombre indica, se usan en otoño y en primavera. Son más polivalentes y, en zonas de clima suave y templado, tienen más vida útil. Obviamente son más ligeros que los de invierno, y más gruesos que los de verano. Es el rango de guantes donde la piel predomina más, aunque puedes encontrar algunos sintéticos de buena calidad. Son de caña media y los hay con diferentes niveles de protección. Algunos modelos incorporan membrana impermeable.
Un guante para cada conducción
Si pilotas una moto deportiva y además eres asiduo a las tandas en circuito necesitarás guantes más técnicos, con multitud de elementos de seguridad para resguardar tus manos al máximo. Son de piel bovina o de canguro, se ajustan a la muñeca y llevan protecciones rígidas de carbono o de titanio en los nudillos, en los laterales exteriores e incluso en las palmas. Además es recomendable que sean bien ventilados para reducir el efecto de la sudoración. Suelen ser aparatosos y escasamente confortables, especialmente los primeros días de uso.
Para conducción urbana, usa guantes más confortables, con protecciones menos engorrosas. Especialmente, busca que se quiten y pongan con facilidad. Suelen ser de caña corta o media y fabricados en una amplia gama de materiales. En este renglón, el confort se impone a la seguridad, sin dejarla de lado, claro está.
En el caso que seas un motero viajero, tus guantes son los de turismo, que están a medio camino entre los deportivos y los urbanos. El confort es importante, porqué los usaras muchas horas, pero valora que tengan buenas protecciones, que en este tipo de guantes suelen ser blandas o poco aparatosas. Como en los de ciudad, se fabrican en diferentes materiales.
Cuando pilotes una moto de off road, escoge un par de guantes específicos para esta especialidad. Mira que sean ligeros, que se adapten muy bien a la forma de tu mano y que sean ventilados. Suelen fabricarse en material textil, llevan unas protecciones mínimas en la palma y los nudillos, y son de caña corta. Es importante que se fijen bien a la muñeca con velcro.
Te hemos dado las claves técnicas para hacer una buena elección de guantes para motorista. El último criterio lo fijas tú mismo, que es el presupuesto que quieres invertir en tus guantes. Te recomendamos que no escatimes euros en esta parte de tu equipamiento de motorista, que, a nuestro criterio, es la segunda más importante después del casco. Sólo tenemos dos manos y son para toda la vida. ¡Cuídalas!